Los productos que ofrecemos en Workanna nacen de una alianza comercial entre la italiana THCbd y un grupo de amantes del cannabis procedentes del norte de España. Entre los dos hemos creado lo que muchos consideran imposible: cannabis competente, de aroma y sabor complejo y de gran calidad respetando una de las leyes más estrictas de THC en Europa.
Nuestro objetivo en Workanna no es otro que transformar el mercado del cannabis; es una meta ambiciosa, somos totalmente conscientes de ello, pero no nos vamos a echar atrás. Creemos en nuestros productos y en las genéticas con las que se producen, así como en el trabajo que hay detrás en cada eslabón de la cadena.
Cada pieza de nuestro catálogo es el resultado de años de I+D. Las genéticas que hemos ofrecido a THCbd para la producción de flores son variedades muy ricas en CBD, con un perfil aromático inalcanzable, fruto del ejercicio del breeding de manera prolongada y consiste en el tiempo. La manera en la que se aísla el CBD para la producción de aceite, o el método que usamos para la elaboración de las extracciones es totalmente vanguardista. Todo el manipulado de los cogollos se hace de forma manual, un ejercicio de paciencia para ofrecer los mejores acabados en nuestros productos. Es la combinación de todos estos elementos, la que convierte a nuestros productos en el buque insignia del CBD.
CBD hoy:
Al consumidor habitual de CBD le lanzamos una pregunta sencilla, ¿sabes de dónde bien el CBD que consumes? E incluso más importante que el origen, ¿sabes cómo se ha cultivado ese CBD?
Aquí no estamos hablando de la genética per se, ni de su valor organoléptico o la riqueza de su perfil de cannabinoides. Muchas marcas de CBD utilizan variedades de cáñamo industrial para producir los productos que ofrecen en sus catálogos. La mayoría de estas plantas se cultivan en exterior sin prestar atención a factores como la calidad del sustrato en las que crecen, o de las sustancias contaminantes que pueda contener el medio en el que está cultivando (ej. metales pesados) entre otros puntos a tener en cuenta.
Quizás son cuestiones que el consumidor no se plantee antes de consumir un producto derivado del cannabis al ser productos relativamente jóvenes, es un mercado todavía en desarrollo. Lo que queremos decir es que el cliente está desarrollado su criterio respecto a una industria que se encuentra en una edad temprana. Pero si a este consumidor se le ofrece la posibilidad de optar por productos de CBD de calidad acreditada y que cuenten con la garantía que aporta una marca de confianza como Workanna, el sector se verá obligado a evolucionar para poder estar a la altura de un público que será cada vez más exigente en cuanto a estándares de calidad y transparencia.
Somos transparentes, ponemos a disposición del público flores de cannabis de calidad, cultivadas bajo los más estrictos estándares y puedes ver como lo hacemos, de principio a fin. Buscamos el acabado más puro y natural. Las plantas, la materia prima de los productos que ofrecemos, no son tratadas con pesticidas y al producto final, no se le trata con ningún químico. De principio a fin, el proceso de cultivo está bien protocolizado y eso se plasma claramente en los resultados. Los datos que ofrecemos sobre terpenos y cannabinoides son reales y están a tu disposición, acreditados no por uno, si no por dos laboratorios independientes. Incidimos una vez más, nuestros esfuerzos están llamado a transformar el mercado legal de forma positiva.
¿Dónde se cultivan las flores de Workanna?
Ya lo adelantábamos antes, las flores de Workanna se cultivan en las instalaciones de THCbd, en Italia. Esta empresa comparte los mismos valores éticos y morales que nos exigimos a nosotros mismos. Nuestro equipo siempre mantiene un pie en Padova, la ciudad de la provincia de Véneto donde se encuentra la sede de nuestro colaborador, y sus invernaderos de más de hectárea y media de extensión.
En el invernadero, que está rodeado de viñedos, se cultiva cannabis de la más alta calidad, combinando la luz natural con el apoyo de cientos de focos que ayudan a que las plantas se desarrollen plenamente independientemente de la estación en la que nos encontremos. Además, las instalaciones están situadas en una zona con aguas termales, por lo que las instalaciones están climatizadas y mantienen una temperatura muy similar durante todo el año. Esta suma de factores nos permite ofrecer un producto muy similar independientemente de que haya sido cosechado en cosechas distintas. THCbd ha demostrado en numerosas ocasiones su buen hacer y su destreza en el cultivo por lo que a día de hoy poseen nuestra total confianza.
Breeding: ¿Cómo llevamos a cabo este proceso?
El proyecto, herencia de la prestigiosa Dinafem, es el resultado de años de esfuerzo y dedicación. Lo que entendemos como “breeding”, término inglés de cría, es una selección genética. Zambulléndonos en el término para escrutarlo con más profundidad, es una evolución de los ejemplares que se lleva a cabo con la influencia de la mano humana. El proceso consiste en la diferenciación de los individuos de una población basada en la capacidad para donar genes (de los atributos deseados) a las generaciones siguientes.
Todo comienza con un gran cultivo y la búsqueda de ejemplares sobresalientes. Los breeders tienden a acertar con precisión increíble que ejemplares son los más valiosos, haciendo uso solo de sus sentidos. Aunque sus corazonadas son acertadas y pueda parecer que un muestreo exhaustivo no es necesario, es la piedra angular de un trabajo de breeding bien hecho. Se extrae una muestra y se enumera para hacer dos análisis a cada planta. De esta manera, la selección de los ejemplares no se basa en el criterio personal de un equipo, si no en resultados de laboratorio plausibles y comparables.
Este proceso se lleva a cabo con la recogida de las flores, y en función de los principios activos que quieran identificarse (terpenos o cannabinoides), las muestras se tratarán de una manera o de otra. De manera resumida, los análisis de terpenos se hacen a partir de cromatografía de gases, mientras que los de cannabinoides se hacen a partir de cromatografía de líquidos. Son procesos muy distintos que ayudan a medir con precisión muchos de los datos que os ofrecemos y se han llevado a cabo durante años, con volúmenes de muestras simplemente increíbles.
¿Cómo se ofrecen los porcentajes de THC y CBD de los productos de nuestro catálogo? La importancia de los análisis de un laboratorio en productos cannábicos:
Esta es una cuestión controversial. Todas las empresas que comercializan algún derivado del cannabis ya sean semillas, aceites, las propias flores, cremas… ofrecen porcentajes de cannabinoides aproximativos sobre sus productos, pero ¿cuántos de estos datos han sido testados en un laboratorio? No es difícil encontrar bancos de semillas que ofrecen valores de THC o CBD superiores al 30% en sus genéticas, o vendedores de flores de CBD que insisten en que sus genéticas poseen menos de un 0,2% de THC y no es cierto.
Imaginemos por un segundo que no se hace con uno de esos cogollos que en principio es legal y resulta no serlo, o con una semilla con la que cree que obtendrá unos valores de cannabinoides y obtiene otros muy distintos ¿cómo se puede proteger el consumidor del fraude de los valores de cannabinoides? El vendedore de este tipo de productos podría escudarse en que cada ejemplar es único, que las plantas son seres vivos y que existe un margen de error en este sector, pero la manera de cerciorarse de que no tendremos problemas es simple y llanamente, exigir un resultado de laboratorio que acredite los valores de sus productos.
Las flores que ofrecemos en Workanna han sido analizadas y sus datos sobre niveles de cannabinoides y terpenos son totalmente verídicos. No solo eso, si no que los resultados son accesibles a cualquiera, ¿por qué? Porque consideramos que es esencial y un derecho para el cliente. Esta manera de hacer es muestra de nuestro compromiso no solo con el consumidor sino con el cannabis y su paulatina entrada en el mercado legal.
El futuro del cannabis:
En Workanna tenemos una visión bastante clara de cuál será el futuro del cannabis. Creemos que la oferta de cannabis crecerá, así como los perfiles de terpenos y cannabinoides que se persiguen desde hace décadas. Se romperá con los monolíticos THC y CBD y entrarán a escena otros cannabinoides como el CBG o el THCV entre otros. Este proceso no sólo exige un mayor rango de variedades con diferentes porcentajes de cannabinoides adaptados a cada tipo de consumidor; también exige garantías de que estos porcentajes son reales y estables.
Nuestra manera de trabajar está planteada para que sea lo más compatible con esta visión que compartimos ambos equipos. Es decir, buscamos que los porcentajes de cannabinoides y terpenos específicos se puedan replicar en los distintos formatos que podamos ofrecer. Desde un bote de flores, a uno de aceite. Para ello es indispensable que el proceso de “breeding” y selección se ha llevado a cabo de forma objetiva y eso nos lleva, una vez más, al punto de partida: no basta con el buen ojo, olfato y buen hacer del breeder, el laboratorio y los análisis deben de ser la brújula que nos guíe en este proceso.
Para crear una genética que se adecue a los objetivos que se presten no vale solo con la experiencia sensorial. El objetivo de la investigación científica de nuestras variedades está enfocado a la toma de decisiones en estos procesos de selección. Se analizan cientos de ejemplares y, los seleccionados, se estabilizan por varias generaciones para que sus características sean replicables de manera fiable.